Alrededor del trabajo de parto hay muchos mitos que no se corresponden a la realidad. Si bien es claro que hay dolor y molestias, lo cierto es que con la preparación adecuada , lo incómodo puede pasar a un segundo plano.
Por: Espectador de Caracas con información de Mejor con Salud
El trabajo de parto causa inquietud en muchas mujeres, en especial si son primerizas. Es muy habitual que haya temor, en especial porque circulan muchas narraciones traumáticas, casi siempre de familiares o personas mayores.
Hoy en día existen procedimientos que reducen el dolor de manera notable. Si bien puede haber molestias, estas no tienen por qué ser intensas o intolerables. Es muy importante que las madres se informen para que lleguen al trabajo de parto más tranquilas y preparadas.
10 claves que te facilitarán el momento del parto
El trabajo de parto consiste en lograr una dilatación del cuello uterino hasta los 8 a 10 centímetros. Una vez ocurra esto, el cuerpo está preparado para que el bebé pase por el canal del parto y llegue al exterior.
Hay algunos factores que facilitan el trabajo de parto y que es importante conocer para que todo se desenvuelva de la mejor manera. Son los siguientes.
1. Mantenerte en forma
La preparación para el trabajo de parto comienza mucho antes del momento de dar a luz. Es muy importante que hagas ejercicio de forma regular durante la gestación. Lo más aconsejable es caminar, nadar, hacer yoga o pilates. Las elongaciones y los ejercicios de respiración son muy aconsejables.
2. Educación maternal
Los cursos de educación maternal son muy positivos para afrontar el trabajo de parto de la forma más adecuada. Allí, obtendrás una valiosa información y también podrás despejar dudas. Debes acudir con otra persona que no necesariamente tiene que ser tu pareja. Lo ideal es que, sea quien sea, te aporte calma y serenidad.
3. Alimentación balanceada
Una alimentación adecuada no solo te evitará muchos problemas durante la gestación, sino que también es un factor que facilita el trabajo de parto. Las madres obesas tienden a tener niños más grandes, lo cual puede dificultar las cosas al momento de dar a luz.
4. Un buen control prenatal
Los controles prenatales son decisivos para que no haya ningún inconveniente o sorpresa desagradable durante el trabajo de parto. Esas consultas te permitirán mantener un seguimiento sobre tu salud y la del bebé. Además, también es un espacio para despejar dudas y temores.
5. Informarte y elegir bien
Es muy importante que elijas un médico y un centro de salud que te generen confianza. También es fundamental que tengas acceso fácil a ellos. Asegúrate de que el hospital en el que vas a dar a luz tenga todo lo necesario en caso de que haya alguna complicación o eventualidad.
6. Técnicas de relajación
Las técnicas de relajación son una herramienta muy valiosa, tanto durante la gestación como durante el trabajo de parto. A través de ellas puedes aprender técnicas de respiración que son muy útiles tanto para manejar el dolor y las molestias como para serenar tus emociones.
7. Distracción y relajación
Al inicio del parto puede ser muy positivo que te des una ducha de agua tibia. Esto te relaja y alivia el malestar ocasionado por las contracciones. También es buena idea llevar un libro, música o un ordenador portátil para distraerte; esto ayudará a que percibas que el tiempo pasa más rápido.
8. Elige la postura
Si la matrona o el personal médico lo aprueba, podrías caminar, ponerte de cuclillas, caminar o acostarte de lado. También es posible utilizar un balón medicinal, ya que esto contribuye a que se relajen los músculos de la pelvis y facilita el paso del bebé al momento del parto. Debes sentarte sobre el balón y hacer movimientos rotatorios.
9. Masaje y movimiento
Un masaje sencillo ayuda a que se segreguen endorfinas y estas hormonas te ayudan a sentirte mejor desde el punto de vista anímico. Sería muy adecuado que tu pareja te lo hiciera. Caminar o, incluso, bailar puede ser muy positivo para controlar las molestias y ayudar a que el bebé descienda por el canal de parto.
10. Analgesia durante el parto
La anestesia epidural puede ayudar a acelerar el trabajo de parto. Contribuye a relajar los músculos y facilita la dilatación. No representa ningún riesgo para el bebé. La única molestia es que limita tu movimiento pero, por lo demás, resulta muy aconsejable.